La de cuatro mil y Rosa Cuchillo en la ENEAE 2015

Con éxito se realizó el Primer Encuentro Estudiantil de Artes Escénicas, que se llevó a cabo del 21 al 23 de mayo en las instalaciones de la Universidad Católica de Lima, en el que estudiantes de cinco instituciones dedicadas al arte participaron de las diversas conferencias y talleres para intercambiar experiencias, investigaciones y reflexiones sobre la importancia de estudiar en forma académica las tres grandes áreas de las artes como son el teatro, la danza y la música.

Organizados en la Asamblea de Estudiantes de artes Escénicas, en esta edición participaron jóvenes provenientes de la Escuela Profesional de Danza de la Universidad de San Marcos (UNMSM), de la Escuela de Danza de la Universidad de Ciencias Aplicadas (UPC), de la Especialidad de Artes Escénicas de la Universidad Científica del Sur (UCSUR), del Conservatorio Nacional de Música y los estudiantes de la Facultad de Artes Escénicas, especialidad de Danza, Música y Teatro de la Universidad Católica.

Dentro de este marco se realizaron dos montajes/desmontajes de teatro, el primero realizado el sábado 23 de mayo, estuvo a cargo de los estudiantes de la UCSUR quienes presentaron la obra de Leonidas Yerovi “La de cuatro mil” finalizado el mismo, la directora Ruth Escudero dejó que los actores hablaran sobre sus personajes, el contexto histórico de la obra y su trabajo como grupo. Esta obra la van representando desde el 2013 y cada actor o actriz ensaya y representa todos los personajes, para que cada uno observe a los compañeros y les dé un valor agregado. La escenografía ha ido variando cada año, empezaron con trabajar con algunos cubos y ahora tienen muebles y vestuario de época. Esta comedia escrita por Yerovi a manera de sátira, pone en evidencia la tendencia de los criollos por mantener costumbres y modas del viejo mundo. Los enredos se basan en la confusión de personajes. Son gente de pueblo que quiere salir de la pobreza por un golpe de suerte con el juego de la lotería en el caso de los varones, o por el esfuerzo y el trabajo en el caso de los personajes femeninos.

Cada actor representó su papel sin exageraciones, buena vocalización y atentos para salvar uno que otro detalle que exigiera la improvisación, como la caída de un objeto y recogerlo sin llamar la atención. Aunque el peso inicial estuvo en dos actores, Don Canuto y su sobrino Cortijo, quien sobresalió en su interpretación fue el personaje de Rufa, la arequipeña que se defendía al estilo ninja. Una obra fresca, divertida bien presentada.

El segundo montaje se realizó el sábado 23 teniendo como invitada a Ana Correa quien presentó el unipersonal de su autoría “Rosa Cuchillo” y dirigida por Miguel Rubio. Antes de su representación Ana Correa explicó el proceso de construcción de su obra acompañada de un video que complementó acertadamente su exposición. De no haber sido así, nuestra lectura de la obra hubiera sido limitada. Ana mostró en las imágenes, a un público joven y citadino, ajeno a lo que vivió nuestro país en época del terrorismo, el testimonio de quienes sufrieron la desaparición de sus seres queridos.

“Rosa cuchillo” es un espíritu que busca incansablemente a su hijo, asesinado y desparecido, para devolverle la paz que le fue arrebatada. Rosa nos relata la historia de su vida y cómo se ganó su apelativo. Es una historia de amor filial a pesar de la violencia que les tocó vivir, de esperanza y reencuentro.

La obra está diseñada para durar no más de veinte minutos y para ser montada en los mercados de provincias, en donde se suele alquilar los espacios para la venta de productos. Por eso el escenario tiene una dimensión de dos metros cuadrados aproximadamente, en el que se desplaza Ana Correa.

Hay muchos detalles que enriquecen esta obra, como el vestuario y maquillaje todo blanco etéreo, los ritos con los que trata de romper con el pasado, cuando usa el cuchillo para cortar todo aquello que les hizo daño, y luego esparcir pétalos de rosas, lo más lejos posible, para que alcance a todos esa paz que andaba buscando. Los estudiantes que presenciaron esta obra obsequiaron efusivos aplausos a esta talentosa actriz y finalmente le dieron un diploma reconocimiento a su excelente trabajo.

Ada Landeo Torres