TODO EL MUNDO EN SANTIAGO
Sobre
“EVERY-ONE” en “Santiago a mil”
Santiago de Chile es una de las capitales más modernas de Latinoamérica. En su arquitectura de edificios de líneas verticales que componen grandes unidades residenciales se asienta su paisaje social: un “collage cultural” diverso nacido de los procesos migratorios “del sur al sur”. La alta demanda de piezas ha generado arriendos altos y, además, “la identidad del inquilino”, una extraviada sensación de pertenecer y ser propietario de algo.
Santiago de Chile es una de las capitales más modernas de Latinoamérica. En su arquitectura de edificios de líneas verticales que componen grandes unidades residenciales se asienta su paisaje social: un “collage cultural” diverso nacido de los procesos migratorios “del sur al sur”. La alta demanda de piezas ha generado arriendos altos y, además, “la identidad del inquilino”, una extraviada sensación de pertenecer y ser propietario de algo.
"Every-one" (Foto: Lisa Rastl) |
Un “no lugar” es el espacio para la
circulación acelerada –aeropuertos, medios de transporte, centros comerciales e,
incluso, zonas residenciales– en donde la identidad es anónima y no se generan relaciones.
Tampoco existen como entidades desligadas de “los lugares”, sino que están en íntima
coexistencia generando problemáticas sobre el hacer territorio.
“Every-one” es el trabajo artístico que trae
a “Santiago a mil” el austriaco Willi Dorner. Estrenada en Austria por el 2016,
el director pretende seguir la línea que caracteriza su trabajo: el uso del
espacio público para reflexionar. Ocho bailarines irán desplazándose y
desplazando al público por plazas, parques, zonas residenciales, estaciones,
bares y calles sin salida. El montaje interviene en lo cotidiano y lo
cotidiano en la obra. Su propuesta de “site-specific art” –término aplicado a las
creaciones artísticas realizadas en un espacio determinado– llama la atención
sobre la conciencia del espacio intervenido sin artificios gratuitos para el
espectador y su entorno.
"Bodies in urban spaces" de Willi Dorner |
Dorner se inspira en los años 20 del siglo pasado,
tiempos de la posguerra y progreso industrial que altera los patrones de vida
en la ciudad. El arte de esta época, consciente de las tempranas desilusiones
de la modernidad, busca nuevas rupturas de forma y fondo que dan origen al
“vanguardismo”.
Pero, ¿qué puede decir “Every-one” en el
aquí y ahora de su nuevo sitio específico? La obra podría enmarcarse en la
crítica de arte de “la época de la reproductibilidad técnica” del filósofo alemán
Walter Benjamin (1892–1940), quien sigue los rastros de la producción artística
en la época de la industrialización caracterizada por la repetición y falta de
autenticidad. Santiago vive un tiempo arquitectónico de
clonación en serie de paisajes urbanos residenciales. “Los no lugares” comienzan
a expandirse por los espacios y tiempos de esta ciudad, desconfigurando el aquí
y el ahora, “el aura”, que Benjamin define como alma y sentido de originalidad,
el hecho irrepetible que pertenece a un lugar específico.
Los ocho de Every-One (Foto: Lisa Rastl) |
La pregunta puede ser, incluso, extensiva y
participativa: ¿cómo imaginamos y planificamos a Santiago?, ¿cómo transmutar
los “no lugares” a lugares de identidad, relación e historia?, ¿cómo recuperar
y hacer territorios sociales? Preguntas que no deben ahogarse en la melancolía
de lo que un día fue, sino en las posibilidades que genera las nuevas
identidades de ese collage cultural donde todos somos cada uno.
Santiago casi no es Chile. Santiago es de
Chile, pero también de todos esos rostros extraños que cruzan las avenidas,
esperan los buses o buscan los precios más bajos en las tiendas. También de
quienes soportan alegremente el día de algún regreso, si es que aún quedan
ganas de regresar, si es que el corazón nunca hizo un poquito de territorio.
FICHA
DE LA OBRA
“Every-one”
Concepto y coreografía: Willi Dorner
Elenco: Britt Kamper, Hugo Le Brigand,
Emily Mézières, Christelle Nazarin, Raquel Odena, Stève Paulet, Esther
Steinkogler y Luan de Lima da Silva
Vestuario: Katharina Heistinger
Asistente de vestuario y accesorios: Alba
Marie Rastl
Producción: Stefanie Reichl
Co-Producción: Provinciaal
Domein Dommelhof/Neerpelt, La Strada, Graz, Lieux publics, Centro nacional de
creación, Marseille, Festspielhaus St. Pölten,
St. Pölten
Con el apoyo de La Briqueterie, Vitry-sur-Seine,
Paris, Oficina Cultural de la Ciudad de Vienna
KEVIN
RODRÍGUEZ
Crítica
Teatral Sanmarquina
Desde
“Festival Santiago a mil”
Comentarios
Publicar un comentario