"Los años 50 siempre me han interesado muchísimo"

Entrevista a JOAQUÍN VARGAS

Director de “¡Ay amor!”
Funciones: Del 18 de febrero al 13 de marzo de jueves a lunes a las 8pm
Lugar: Auditorio ICPNA (Av. Angamos Oeste 120, Miraflores)

Luego de un intenso trabajo al mando de la célebre “Piaf”, las reminiscencias guían nuevamente a Joaquín Vargas. En “¡Ay amor!” el director sigue los linderos de un amor afincado en la Lima de los años 50, reseñados con gracia e ironía entre crónicas y textos de Domingo Tamariz y Alfredo Marsillach.

Cual amor de verano, esta comedia musical presenta a una típica relación de época que ve crecer –y tropezar– su amor a lo largo del tiempo. Divertidos y versátiles, Ricky Tosso y Patricia Barreto dan vida a esta singular pareja que “narra” su historia entre baladas, cumbias y salsas del recuerdo.

“¡Ay amor!” es un homenaje a una Lima que se fue y a los amores jurados entre tensiones políticas, tranvías y rocolas. Tan apasionante como delirante (para los más jóvenes, quizá), Vargas nos entrega un trabajo crítico y tierno sobre el amor y la moral en evolución. Crítica Teatral Sanmarquina conversó con el director sobre esta nostálgica puesta que revive a los café concert de antaño.

¿Cómo sales del proceso de “Piaf” y te aventuras por uno totalmente distinto?

Son distintos sí, pero ambos son apasionados. Para mí los años 50 siempre me han interesado muchísimo y quería abordarlo de una manera distinta. No dentro del drama musical, sino de una forma más ligera como la comedia musical que analiza los problemas, pero sin demasiada profundidad.

Desde una perspectiva del Café Concert, género en el que uno puede reírse un poco del momento. Así la puesta en escena brinda rápidas secuencias, la historia no se torna densa ni larga porque presenta viñetas en el tiempo adornadas por música con la que el público se va a identificar.

¿Por qué hablar de una historia de amor en la Lima de los 50 o 60?

Vivimos en una época frenética. En “¡Ay amor!” vemos todo lo contrario: teníamos más tiempo para ver y analizar las cosas. Las relaciones eran más ingenuas, cuidadosas, había “más moral” de la que hay ahora. Con eso vivimos, crecimos, hemos tenido hijos y formado una familia.

Esto para tu generación es una cosa de locos. Los jóvenes se preguntan ¿por qué mi papá y mi mamá son “tan antiguos”? Nosotros tuvimos una formación distinta a la de ustedes. Ese pasado nos formó y golpeó en su totalidad con sus problemas políticos, sus dictaduras y guerras.

Luego llegó el momento de la libertad sexual, se inventa la píldora anticonceptiva: todo lo que era la sexualidad cambió. “¡Ay amor!” aborda un poco de cómo fue este proceso para llegar hasta donde estamos ahora, siempre desde la mirada de una pareja de enamorados.

¿Qué te atrapó de este contexto tan convulso?

¡Imagínate! Yo nací en 1950. No era ni joven ni adolescente, era un niño, pero tengo recuerdos. Al inicio comencé a mirar hacia atrás para ver qué sucedía en mi casa y escuchaba sobre temas que después reproduciría en diálogos.

Se hablaba de política, candidatos presidenciales, música, los artistas que venían al país. Leyendo textos de Alfredo Marsillach y crónicas del periodista Domingo Tamariz descubrí la esencia de los años 50 de una forma increíble.

Leí sus tres tomos para sentir la presencia de un adulto en esa época. Pude conocer los sitios que se frecuentaban como el “91”, el “Pigalle” o los sitios del Cream-Rica del Jirón de la Unión. Ahí se comenzó a gestar la ciudad.

Al ser una comedia musical, ¿cuánto y cómo aporta la música?

La música es como un comentario sobre una determinada época. Y cada época tiene un género musical específico. Recrearla es un nexo con el público que reconocerá la canción y se identificará. Creo que es una forma muy sensible de llegar más a la esencia de la escena que queremos presentar.

FICHA ESCÉNICA

“¡Ay amor!”, de Joaquín Vargas, basado en textos de Alfredo Marschillad y crónicas de Domingo Támariz

Dirección: Joaquín Vargas

Lugar: ICPNA de Miraflores (Av. Angamos Oeste 120, Miraflores)

Elenco: Patricia Barreto, Ricky Tosso, Alejandro Villagómez y Roberto Chicoma (piano)

La temporada va del 18 de febrero al 13 de marzo

Las funciones van de jueves a lunes a las 8pm

EDER GUARDA / LUISA RAL

Crítica Teatral Sanmarquina