LOCAMENTE HUMANOS

 Sobre: “MANICOMIO” / Mever Producciones 

La noche empieza con una banca solitaria en un frío patio. Una cama hacia la derecha del escenario pareciera indicar que los protagonistas sufrirían un trato menos que humano.

Emilio (Arteaga), Mateo (Bardales), David (Gutiérrez)
 y Andy (Mejía) en "Manicomio" 

Efectivamente, así es la vida de tres residentes del “Manicomio”: Mateo (Jorge Bardales), Emilio (Alexis Arteaga) y Andy (Gianfranco Mejía) quienes ven trastocada su monótona rutina con la llegada de David (Jorge Gutiérrez).
El nuevo interno se muestra distante e incómodo al inicio, quizá porque, a diferencia de los demás, él ha sido ingresado por un tema conductual más que neurológico, o así lo cree él. 
Más adelante, en el desarrollo de la obra, conoceremos la historia de cada protagonista. El público observará cierta “normalidad” en los cuatro personajes que son introducidos en la trama como seres sintientes con sueños e ilusiones. En contraste, un personaje más siniestro expondrá el diagnóstico de cada uno de la misma forma impersonal como se lee una lista de compras para el supermercado.
El director del manicomio, Jason, es un dictador implacable que no dudará en hacer uso de la fuerza física, inclusive cuando ésta no sea necesaria. Villano sin remedio, la interpretación de Fernando Pasco deja un sinsabor en el espectador que, de seguro, se preguntará si verdaderamente se puede encontrar un nivel tan bajo de humanidad en alguien que tiene a su cargo una institución médica y de quien se espera que sea todo lo contrario. 
Y, como no hay mal que por bien no venga, es precisamente el trato abusivo e injusto el detonante para que nuestros protagonistas decidan convertirse en héroes de sus propias historias y unan fuerzas para cambiar su realidad.

Jason (Pasco), la enfermera (Astete) y
el asistente del director (Sánchez)

Desde la posición incómoda en que tuve que ver la obra (no recomiendo al espectador sentarse en la última fila de asientos al borde del pasadizo medio del teatro) la apreciación de la escenografía se desdibuja un poco cuando los actores parecen estar en el patio de una institución mental y, al mismo tiempo, en una habitación simulada por la cama, ya que en varias escenas se encuentran muy cercanos a ella. Particularmente, pienso que la aplicación de luces y sombras para resaltar un espacio u otro podría ayudar a tener una separación visual de los ambientes. Hacia el final, me encuentro con la sensación de haber querido ver una mayor energía en el personaje de David sobre el clímax de la trama, pero, no por ello, le resto mérito a su papel y desempeño, que cumple con ser el motor de la historia. Asimismo, Bardales, Arteaga y Mejía son los tres pilares divertidos en los que se sostiene la historia. Destaco los momentos tiernos que nos regalan.
Manicomio”, dirigida por Gianfranco Mejía, es una crítica dura a un sistema poco conocido y, quizá, poco tomado en cuenta por una sociedad cuyo mayor acercamiento a la salud mental, en general, son las parodias cómicas televisadas y memes que circulan en las redes sociales. La obra de Mever Producciones vale mucho la pena ser vista en cuanto deje, al menos, una reflexión mínimamente empática en los espectadores. Pueden ver Manicomio” en el Teatro Auditorio Miraflores, los miércoles a las 8:30pm hasta el 28 de junio. Las entradas se pueden adquirir en Teleticket y la boletería del mismo teatro. 

FICHA DE LA OBRA
Manicomio” de Gianfranco Mejía
Dirección: Gianfranco Mejía
Elenco: Jorge “Coco” Gutiérrez, Jorge Bardales, Alexis Arteaga, Gianfranco Mejía, Pilar Astete, Fernando Pasco y Pedro Sánchez Díaz
Lugar: Teatro Auditorio Miraflores (Av. Larco 1150, Miraflores)
Temporada: Del 17 de mayo al 28 de junio
Funciones: Miércoles a las 8:30pm
Entradas: S/ 45 (General) en Teleticket y boletería del teatro
Un montaje de Mever Producciones
Redes sociales: Facebook / Instagram 

MARISOLEIL
Crítica Teatral Sanmarquina

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