Tiempo para amar

Este título inofensivo es un ejemplo de “riesgo” que suele presentarse en las ediciones del Festival de Teatro Aficionado. En primer lugar porque “Tiempo para amar” es una comedia atípica y poco usual, en el buen sentido de la palabra, ya que mezcla amores imposibles, referencias cinematográficas plausibles y un ramillete de situaciones hilarantes y desenfadas con un resultado bastante satisfactorio. El argumento –o argumentos– puede rastrearse desde una herencia dada por un padre que fallece como tres en escena, la disputa de un bella dama entre un hombre rico y uno que no, pero de gran corazón y que recurre a un excéntrico joyero para conquistarla con un anillo, y luchas en monasterios con monaguillos irreverentes u hospitales con pacientes ebrias. Cierto, pero todo esto sucede en escena. Mientras esto ocurre, el público ríe y se divierte. Pero, como se mencionó líneas arriba, la puesta sigue siendo de “riesgo”. Es común que los grupos de teatro recurran a ciertos recursos “efectistas” (como la musicalización o la caracterización) o personajes estereotipados para entretener al público, pero, por hacerlo, podrían caer en una espiral de las puestas simplistas. En “Tiempo para amar” existen algunos trazos de esto que no desmerecen, sin embargo, el trabajo fresco de sus actores y la visión desenfadada de su director.

Ficha artística

“Tiempo para amar”

Dirección: José Carlos La Rosa Matos

Actúan: José Carlos La Rosa Matos y otros actores

Grupo de Teatro Valiz

Sétimo festival de Teatro Aficionado

Sábado 3 de agosto

EDER GUARDA

Crítica Teatral Sanmarquina